
Alegoría de Navidad
Belén
El Portal: una sala de quirófano clandestino; una virgen impúdica, tendida en el potro de operaciones, cegada por la luz de los focos de neón; sedada, no gime, no se lamenta por el asesinato que está dispuesta a consentir.
El progenitor, ausente, al que nada le confiere el delito, se aparta de la escena. No se lamenta: se regocija por el peso de responsabilidad que le ha abrumado. Ya de sus cuitas liberado se fuma un porro en la antesala, que le alivie del peso de su irresponsable conducta.
La vaca: una ayudante de blanca bata, experta en infanticidios, levanta amenazante los forceps, herramientas del asesinato infame, ni siquiera con su vaho calienta la sala fría del paritorio.
La mula: un “doctor muerte” cualquiera, acuchilla como vulgar matarife las entrañas de una abortista de plomo y exangüe, y extrae del útero virginal un amasijo de la existencia humana que rezuma sangre, y de heces que oculta la esperanza, mientras una secretaria cuenta uno a uno el metal de la minuta.
El pesebre: una bolsa de basura, negra como el alma de los asesinos y cómplices, recoge los despojos de un Niño Jesús masacrado, al que ni siquiera le han permitido gemir.
La familia, en la sala de espera, no escucha la música de un villancico que se apaga en la distancia:
“Manolito, chiquito, Rey de los cielos, Rey de los cielos,
que naciste Pequeñito, sin pedir palabra,
sin consuelo”….
La estrella que guió a los Reyes de Oriente se apaga. Y la magia de los magos ya no hace feliz a la infancia. El día de los Santos Inocentes ha sustituido a la Natividad.






Original la idea, la foto me ha revuelto el estomago….aghhhh
¡ De eso se trata! Impresionar y torcer la mala conciencia en la buena dirección contra el negocio del asesinato.
Muy bonita la Alegoría de Navidad. me ha gustado mucho la idea.
Un abrazo. Emilio.
¿ Acaso no es inmoral que los “socio-muertes” hayan dilapidado casi €40 millones en subvencionar las nazi-clínicas abortistas en 2010, y por tanto cómplices de los asesinatos de seres vivos potenciales ?